Cada 18 de octubre se busca concientizar sobre la menopausia, una etapa vital que atraviesan todas las mujeres, pero sin embargo es aún poco conocida su vinculación con el corazón.
Según la definición de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la menopausia es una etapa del ciclo vital en la vida de las mujeres que se presenta entre los 45 y los 52 años de edad, causada por la pérdida de la función folicular de los ovarios y la disminución de los niveles de estrógenos en la sangre.
Esto significa el cese de la menstruación, ya que los ovarios dejan de producir óvulos y este estadio suele estar acompañado por síntomas, tanto físicos como psicológicos.
No obstante, la “menopausia prematura” es un fenómeno usual que se produce cuando las mujeres experimentan la menopausia a una edad más temprana, antes de los 40 años, generada por una serie de anomalías cromosómicas o trastornos autoinmunitarios.
Entonces, la menopausia significa el final de la vida reproductiva, exceptuando algunos casos muy singulares donde se hayan aplicado tratamientos de fertilización.
En ese sentido, se considera que una mujer está «menopáusica» cuando pasan 12 meses consecutivos sin menstruación, siempre y cuando esto no se deba a una causa patológica o intervención quirúrgica. La transición menopáusica puede darse de manera gradual, comenzando con cambios en el ciclo menstrual, que culminan con su cese.
Si bien esta fase representa el fin de la vida reproductiva de las mujeres, lo que hace que pierdan la capacidad de quedar embarazadas, en ningún momento la menopausia desaparece la posibilidad de contraer infecciones de transmisión sexual a través de contactos sexuales sin protección. Además, el adelgazamiento de la pared vaginal aumenta las posibilidades de la transmisión del VIH.
La decisión de instituir unas efemérides en alusión al Día Mundial de la Menopausia busca reducir el estigma mediante la sensibilización y por otro lado, esta fecha también persigue como finalidad mejorar la experiencia de la menopausia en millones de mujeres, a través del acceso de la información adecuada.
Síntomas
La menopausia registra síntomas tanto físicos como psicológicos, ya que este periodo de la vida producen las mujeres una gran cantidad de cambios hormonales, tales como: sofocos en la cara, el cuello y el pecho, aumento de la sudoración, sequedad vaginal, cambios en la regularidad y flujo del ciclo menstrual, piel seca, cansancio, falta de energía, aumento del riesgo de enfermedades cardiovasculares, debilitamiento de la estructura de la pelvis.
La menopausia también puede producir síntomas que generan un malestar del tipo psicológico en las mujeres.
La menopausia y el corazón
Aunque algunos síntomas de la menopausia, como los sofocos y los cambios de humor, suelen ser los más visibles, a las mujeres de más de 45 años les comienza a suceder algo más que no se puede ver a simple vista, pues aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Si bien, es una creencia general que las mujeres están más protegidas que los hombres frente a las enfermedades cardiovasculares, al llegar la menopausia esa “ventaja” desaparece debido a la disminución del estrógeno en sangre, hormona que tiene propiedades protectoras del corazón.
En ese sentido, en el Día Mundial de la Menopausia 2023, el lema es “Menopausia y enfermedades cardiovasculares”, buscando promover la importancia de que las mujeres mantengan un estilo de vida saludable en orden de poder producir este riesgo.
