En el Día Mundial de la Hepatitis 2023, este 28 de julio, la Organización
Panamericana de la Salud (OPS), hizo un llamado a los países: es hora de ampliar
el acceso al diagnóstico y al tratamiento.
Advierte que la hepatitis viral es un asesino silencioso y cobra numerosas vidas
cada año, con síntomas que solo aparecen cuando la enfermedad está avanzada.
En las Américas, resalta, casi 80,000 nuevas infecciones de hepatitis B y C surgen
cada año, la mayoría de las cuales pasan desapercibidas, lo que arroja como
resultado más de 100,000 muertes relacionadas con la hepatitis cada año.
Para la OPS la clave está en la prevención, que es posible, ya que existen
vacunas y tratamientos efectivos, ofreciendo esperanza para todos.
“La vacuna contra la hepatitis B está disponible tanto para adultos como para
niños, mientras que los tratamientos orales seguros pueden curar la hepatitis C.
Conocer su estado y acceder al tratamiento es crucial para las mujeres
embarazadas con hepatitis B crónica para prevenir la transmisión materno infantil”,
apuntan.
En ese sentido, la OPS trabaja en conjunto con los países de la región para
ampliar el acceso a pruebas diagnósticas, medicamentos y vacunas contra la
hepatitis viral a través del Fondo Estratégico y el Fondo Rotatorio, a objeto de
alcanzar los objetivos de la OPS de eliminar la hepatitis en la Región de las
Américas para 2030 y así evitar muertes innecesarias por infecciones de esta
enfermedad.
Problema de salud pública
Por su parte la doctora Rosalía Perazzo, médico gastroenterólogo del hospital
Miguel Pérez Carreño de Caracas y docente del posgrado de Gastroenterología y
Hepatología, alertó sobre el incremento de casos de hepatitis C en Venezuela.
“Esto se ha convertido en un problema de salud pública. En Venezuela no se
cuenta con tratamientos ni pruebas diagnósticas de fácil acceso para todos los
pacientes con hepatitis C, una enfermedad que puede causar cirrosis, cáncer de
hígado y muerte”, sustentó.
Según denunció, se han presentado brotes de hepatitis C en las unidades de
diálisis a nivel nacional, todas pertenecientes al Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (IVSS) y que muchos pacientes no son referidos a las unidades
especializadas ni reciben tratamiento adecuado.
Resalta que estadísticas de algunos bancos de sangre, reflejan que
aproximadamente 1,2% de la población venezolana presenta el virus C (HVC), y
de este porcentaje sólo 0,07% ha sido tratado.
Ante este panorama, la Sociedad Venezolana de Gastroenterología (SVG) instó a
las autoridades sanitarias a garantizar el acceso a los tratamientos y las pruebas
diagnósticas para la hepatitis C, así como a implementar medidas de prevención y
control de esta enfermedad, que afecta a millones de personas en el mundo y que
puede ser curada con los medicamentos adecuados.