El cáncer de próstata se posiciona como uno de los tumores malignos más
frecuentes de los hombres en el mundo y en Venezuela es la primera causa de
muertes del género masculino con cifras muy alarmantes, pero su
diagnóstico precoz puede garantizar óptimos resultados para su medicación y
prevención.
Como lo destaca, el urólogo Carlos Lugo, especialista de la Clínica Los Cedros, la
próstata es una glándula ubicada debajo de la vejiga de los hombres y el riesgo de
sufrir de cáncer aumenta a medida que avanza la edad, por lo que es necesario
que tomen conciencia sobre la urgencia de realizar los exámenes prostáticos y no
descuidar su pesquisa anual.
“La Urología es una rama de la medicina que combina lo médico y quirúrgico para
tratar las enfermedades del sistema urogenital, incluyendo riñones, vejiga, uréter,
uretra próstata, testículos y piso pélvico, tanto en mujeres como en hombres”,
señala Lugo.
Entre los problemas urológicos que suelen presentarse y que ameritan la atención
del especialista, explica que abarcan desde el cólico nefrítico y obstrucción de la
orina como causa de urgencia más común, hasta la infección urinaria y prolapso
en las mujeres. En el hombre la dolencia prostática es lo que más le afecta y las
mujeres son susceptibles a sufrir infección urinaria porque tienen una uretra corta
y muy cercana a la región perianal, mientras en el hombre la dolencia prostática es
lo que más le afecta.
Como principales métodos de detección en la exploración física, es de mencionar
el tacto rectal y el test del antígeno prostático, PSA, otro procedimiento es la
resonancia magnética prostática multiparamétrica, que tiene mayor sensibilidad y
especificidad para el diagnóstico precoz del cáncer de próstata.
“Las cifras siguen en aumento y por eso el llamado es a reducir los factores de
riesgo, mantener un estilo de vida saludable, pero sobre todo, acudir a la pesquisa
anual con el urólogo.”, recomendó.
Según se detalla, la enfermedad no presenta síntomas, pero hay algunos signos
de alarma que se pueden identificar, tales como problemas al orinar, incluyendo
un flujo urinario lento, debilitado o necesidad de orinar con más frecuencia,
especialmente de noche. Así como sangre en la orina o el semen, dificultad para
lograr una erección (disfunción eréctil), dolor en las caderas, espalda o tórax y
debilidad, adormecimiento de las piernas o los pies, incluso, pérdida del control de
la vejiga o los intestinos.
Advierte Lugo, que el problema de este tipo de cáncer es que su manifestación
clínica es tardía, ya cuando se encuentra muy avanzado y por lo general el
paciente puede presentar dificultad para vaciado de la vejiga, sangrado por la
orina, dolor óseo.